Re-perfomance de Ritmo 0 (1972), como exploración de la des/apropiación del yo a través de la interacción del cuerpo en un espacio público. Marina Abramović puso a disposición de la gente 72 objetos (incluyendo un revólver con una bala) para que ellos los usasen como quisieran sobre su cuerpo. El ejercicio duró seis horas. Marina afirmó haberse sentido violada. La gente empezó de manera tímida su acercamiento pero a medida que el tiempo pasaba, y ante la impasividad de Marina, sus acercamientos se volvieron paulatinamente violentos.